Raíz

La primera vez que plante una semillas de flor, Mari me dijo..
si te descuidas no va a crecer, si olvidas colocarle agua, no va a crecer y si la colocas directo al sol tampoco crecerá, tendrás cuidado.
mire las semillas en mi mano, que pequeñas que son,las sembrare todas para observar cual crece.
Pasaron los días y las semanas, cuando broto una de ellas, y me sentí la persona mas afortunada del mundo,Supongo que no soy tan mala pensé.
Sin embargo con el pasar de los días fueron creciendo una tras otra, estaban ahogándose en una maceta tan pequeña, eran tantas que apenas y podían crecer,Es tiempo de separarlas, y tome una tras otras replantandolas a una nueva casa.
Siguieron creciendo, pequeñas, delicadas,
comenzaron a brotar sus pequeños pétalos,Como el amor de un niño suave, y terso.
Replantee tres tallos en una misma maceta, dejaron de crecer,sus hojas caían, sus pétalos morían, corrí donde mari y me dijo sacalas, corta la raíz, esta muy larga y se están enredando
La raíz al igual que nosotros crecen, se nutren, pero cuando te envuelves de la manera inadecuada empiezas a morir lentamente, sin dolor pues no sabes que estas muriendo, muriendo por tus propias manos, enredada en tus miedos, asfixiada en tus decisiones, sin embargo, si sacas la raíz y la cortas y la vuelvas a plantar te darás cuenta como toma otro rumbo, al igual que nosotros si volvemos a nosotros mismos te darás cuenta que si cortas lo que te ata podrás seguir creciendo y florecer a tu tiempo

La mire incrédula y con todo el miedo del mundo, como si fuese su madre la saque de las macetas y corte las raíces, y al igual que nosotros el miedo inminente a la pérdida hizo que sus hojas se quebraran, parecía incluso que estaba muriendo muriendo en mis manos porque al mirarla sentí que la había asesinado, verla crecer y verla morir era la razón para pensar que había cometido el error de mi vida, sin embargo al igual que todo en la vida, le di una oportunidad, la tome del tallo, coloque mas agua en las raíces que quedaron hasta podría decir lo que queda de nosotros cuando cortamos todo, habia dejado en aquella raíz solo a ella, en su misma esencia, en sus inicios.
dos días después mi incredulidad se hizo ridícula, pues en la oportunidad irradiaba la vida como un sol inminente fuerte y poderosa.

Si te das una oportunidad, aunque sientas que te quedas sin nada, aunque sientas que mueras, 
te aseguro que solo estas dándote una oportunidad para soltar,
una oportunidad de volver a sentir y volar.